Logo Alejo Castillo Marketing Digital
Marketing Digital y Comercio Electrónico con IA

¿Estamos en crisis? ¿O no sabemos cómo gestionarla?

¿Estamos en crisis? ¿O no sabemos cómo gestionarla?

Escribo este post porque veo que hay cosas que no concuerdan. Por un lado, el Gobierno ecuatoriano se presenta en medios diciendo que vivimos la peor crisis económica de la historia. Pero, al mismo tiempo, me encuentro que aparecen noticias de que la fortuna de Jeff Bezos, el CEO de Amazon, ha superado los 200 mil millones de dólares. Algo sin precedentes en la humanidad. Esto me lleva a preguntarme ¿estamos en crisis?

¿Estamos en crisis? Algunos hitos durante la pandemia

El ejemplo de Jeff Bezos y Amazon no es un caso aislado durante la pandemia. Otros gigantes tecnológicos han evidenciado que la supuesta crisis no los ha afectado.

Un ejemplo es Microsoft que, durante Septiembre, registró la adquisición más importante en la historia del gaming. Esta compañía, propietaria de la marca Xbox, adquirió a ZeniMax por la escalofriante cifra de 7 mil 500 millones de dólares. ZeniMax es dueña de Bethesda que a su vez posee los derechos de varias de las franquicias más importantes en el mundo de los videojuegos como The Elder Scrolls, Fallout y Doom.

Dentro de la industria del gaming, Nintendo registró un hito muy importante. Durante el mes de agosto, el valor de las acciones de esta compañía alcanzó su pico más alto en 13 años. Y ya que estamos en esto, Microsoft, Sony y Nvidia han agotado las reservas de sus consolas y componentes de gaming de nueva generación.

Además, otras industrias del entretenimiento, también se han visto potenciadas durante esta época de pandemia. Un ejemplo lo podemos encontrar con Netflix, plataforma de streaming que adquirió los derechos de la serie Cobra Kay, secuela de la película ochentera Karate Kid.

Claro, estamos hablando de monstruos de la tecnología. Pero, en muchas industrias, los negocios se han fortalecido durante la época de pandemia. Por ejemplo, la educación virtual se vende más que nunca. Apps de pedidos a domicilio, han visto incrementar su demanda hasta en un 1.000 %. Y muchos emprendedores han encontrado la excusa perfecta para salir de su zona de confort y utilizar la tecnología para sus negocios. Me incluyo entre ellos.

¿Qué hacer para evitar los efectos de esta supuesta crisis?

Empecemos por entender algo. No es que estamos en crisis. Estamos en un periodo de transformación. Si queremos evitar que esto afecte a nuestros hogares, debemos olvidarnos de la idea de volver a la normalidad.

No es que el COVID-19 ha forzado un cambio en la sociedad. Simplemente lo ha acelerado. Todo lo que está pasando, de todas maneras iba a suceder. Ahora, tenemos una excusa para adaptarnos más rápido a un nuevo modelo. Uno que no necesariamente nos afecte negativamente, mientras tengamos la capacidad de reinventarnos para adaptarnos a las nuevas demandas actuales.

Pero, ¿Qué podemos hacer exactamente?. A continuación, daré una lista de 3 alternativas que podemos manejar el día de hoy, para mitigar los efectos económicos de la pandemia.

1. Tenemos que generar fuentes de ingreso alternativas

Debemos salir de la zona de confort en la que estamos de manera urgente. Olvidémonos del modelo tradicional de conseguir un trabajo y vivir de él. Esto ya no funciona en la sociedad actual.

Si tenemos un trabajo fijo, agradezcamos. Somos más afortunados que la mayoría. Pero, no contemos con que ese lugar de trabajo nos va a sostener por el resto de nuestras vidas. Con la situación cambiante de la actualidad, todas las empresas tambalean y pueden verse en la necesidad de hacer recortes. Y no somos indispensables para nadie.

Si somos buenos en algo, hagámoslo. Vendamos pasteles, cursos, arte, talleres de coaching o lo que sea que consideremos que aporta a la sociedad. Olvidemos el sueldo de fin de mes. Si llega, qué bien. Pero, acostumbrémonos a la incertidumbre. A no saber qué es lo que pasará mañana. Eso es algo que empujará nuestra creatividad.

Además, nunca ha sido tan económico invertir en un negocio como ahora. Ya quedaron atrás los momentos en que debíamos arrendar una oficina, pagar servicios o llenarnos de empleados. Hoy nuestra oficina es nuestra computadora o nuestro celular y nuestro mejor colaborador es la tecnología. Solo necesitamos eso y mucha constancia para empezar.

2. Cambiemos nuestros hábitos

Nuevamente, olvidemos nuestros hábitos pasados y entendamos el mundo en el que actualmente vivimos. Los feriados ya no son iguales que antes. Tampoco lo son los bares, las discotecas o los cines. Entre más rápido lo aceptemos, mejor para nosotros.

En este nuevo contexto, podemos acceder a muchas formas de entretenimiento, pero de otras maneras. Mucho más económicas, más seguras para nosotros y sin que requieran tanta inversión de tiempo. Antes ir a un partido de fútbol era una actividad que me tomaba todo un día. Ahora puedo disfrutarlo desde YouTube invirtiendo mucho menos tiempo. Debemos desarrollar la capacidad de adaptarnos a este nuevo mundo.

Es verdad, no es tan fácil cambiar los hábitos de un segundo al otro. Al igual que muchos, extraño tomar una cerveza después de la oficina, de ver el estreno de una película en el cine o de salir a la playa en el feriado. Pero, lo que no extraño de eso, es el gasto y el tiempo que eso significaba para mí. Con lo que he podido ahorrar, me siento mucho más capaz de crear e innovar.

Además, muchas otras cosas no hacía o que no les prestaba la suficiente atención, son exactamente igual de gratificantes. Por ejemplo reunirme con amigos o familiares por Zoom, ver películas el día de su estreno en la sala de mi casa o tomarme una cerveza con mi esposa un viernes en la noche, mientras vemos un concierto en Facebook.

Es fácil quejarse o extrañar aquello que no podemos tener. Pero, si nos detenemos a mirar el mundo en el que vivimos actualmente, veremos que no es del todo malo.

3. Aprender sobre tecnología

Tal vez, lo más importante de todo. Y, en este punto, debemos aceptar que la tecnología no es nuestra enemiga, sino todo lo contrario. Debemos quitarnos la idea de que la tecnología quita los trabajos. En realidad, allá yo puedo descargar tareas operativas que me resultan improductivas para enfocarme en lo importante: en crear.

Entonces, si vemos el mundo con detenimiento ¿estamos en crisis? En mi opinión, nunca hemos estado mejor que ahora. La situación nos obliga a ser más creativos, a aprender cosas que no pensábamos que podíamos hacer y a disfrutar de buen entretenimiento, sin necesidad de gastar tanto.

Ahora, quiero leerte en los comentarios. ¿Tú tambien piensas que estamos en crisis? ¿O simplemente estamos manejando mal una transformación que de todas maneras debía darse?

¡Nos vemos pronto!

Entusiasta del Marketing Digital y la Tecnología. Experto en IA. Director de carreras, profesor e investigador. Fanático de los videojuegos y del cine.

Compartir

3 respuestas

  1. La crisis se evidencia en la forma de tomar las cosas, sin duda la mejor forma es exprimiendo lo mejor que tenemos para ponerlo a trabajar en nuestro beneficio, todos somos buenos en algo, un momento difícil solo tiene que enseñarnos a valorarnos y obtener ingresos de lo que sabemos hacer bien.

    Los seres humanos somos animales de costumbre, siempre se ha dicho, pero por hábitos que ya creamos nos acostumbramos a las situaciones que vivimos, nos acomodamos y difícilmente aceptamos los cambios viéndolos como algo negativo. No necesariamente debe ser así, este cambio se veía venir y solo nosotros le estábamos dando tiempo, negándonos a evolucionar.

    Un proceso de transformación duele, sino veamos el típico ejemplo de la mariposa, muere la oruga para liberar un ser que vuela pero es un cambio muy grande, cambia todo un mundo alrededor de un ser así que hay que aprender herramientas para vivir en ese nuevo mundo, de la mejor manera.

    Aprendamos lo que necesitamos saber para que el mundo no nos coma vivos y seamos nosotros quienes podamos enfrentar de forma eficaz los nuevos retos y así conquistarlos.

  2. El mundo tiene que, obligatoriamente, volverse más inteligente, porque, una moderna definición de inteligencia es la capacidad de adaptarse eficientemente a las circunstancias cambiantes de la vida. Este artículo aporta a encontrar una respuesta positiva al sacudón que nos ha dado la pandemia del Covid-19

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Publicar un comentario

×