IVA en servicios digitales: ¿Cómo afecta a los negocios?

A partir del 16 de septiembre de 2020 se gravará IVA en servicios digitales en Ecuador. Esta no es una práctica nueva. De hecho, en otros países latinoamericanos como Argentina, Uruguay o Costa Rica, algunos servicios digitales ya gravan IVA. Sin embargo, cabe preguntarse ¿cómo afecta esta medida económica a los negocios online?

Y en ese sentido, es importante aclarar que el foco de este artículo no es discutir sobre si está bien o no el pago de impuestos. He leído opiniones encontradas sobre si servicios como Netflix, Spotify o Steam deberían gravar IVA. Eso es parte de otra discusión. Lo importante acá es entender cómo los emprendimientos digitales se pueden ver afectados por ello y qué acciones podemos tomar para evitar el impacto.

IVA en servicios digitales: ¿Cuáles son los sectores más afectados?

No es la primera vez que ante una situación de crisis se encarecen los servicios de entretenimiento. Sin embargo, este no será el único sector afectado. La medida impactará a plataformas educativas como Crehana, Domestika o Udemi. En ellas podemos encontrar cursos online en los que capacitarnos en áreas específicas. Sobre todo en aquellas vinculadas a la tecnología.

Además, otros servicios netamente orientados al emprendimiento digital se verán afectados. Entre ellos, están el sistema de gestión de contenido de WordPress, la plataforma para tiendas online Shopify, el servicio para creación de sitios web de Wix, entre otros.

Finalmente, otras plataformas como Facebook Ads o Google también gravarán IVA. Esto puede afectar a la inversión que realizan agencias digitales o emprendedores para aumentar la visibilidad de sus marcas.

¿Entienden los gobiernos el mundo en el que vivimos?

En principio, este nuevo impuesto no debería afectar demasiado al movimiento de los negocios digitales. Un encarecimiento del 12% no es demasiado. Con pequeños ajustes deberíamos poder continuar adelante con nuestra gestión.

¿El problema? Mi percepción personal es que los gobiernos saben muy poco de tecnología y de lo que se puede conseguir con ella. En el contexto actual, los emprendimientos tecnológicos no solo deberían ser impulsados por el estado, sino incluso premiados.

Lo mejor que le puede pasar a un país latinoamericano es que sus ciudadanos creen negocios sostenibles desde sus propios hogares. Quienes trabajan desde casa contaminan menos, tienen menos riesgo de enfermarse, se autoeducan, generan fuentes de empleo y pueden atraer inversión extranjera. En este sentido, invertir en tecnología debería ser una obligación para países que quieran salir del subdesarrollo.

Sin embargo, la realidad es otra. No solo que existe en un desconocimiento del potencial que tienen las tecnologías en la actualidad en países latinoamericanos. Parecería que estas medidas están hechas para castigar a quienes las utilizan.

¿Cómo proteger nuestros negocios digitales ante este incremento del IVA?

Seguro llegará el día en que los gobiernos latinoamericanos entiendan la importancia de la tecnología para el desarrollo de las sociedades. Pero, mientras tanto, nos corresponde a nosotros tomar nuestras propias medidas para evitar el impacto y mitigar los riesgos.

En este contexto, ¿es recomendable invertir igual o menos en plataformas digitales? En mi opinión, se debería invertir más. Irónico, ¿verdad? Me explico. Este tipo de medidas suelen generar especulación y mucha gente puede retirar sus presupuestos de plataformas digitales.

En una economía de libre mercado como la que vivimos, lo que dictamina el valor de un servicio es la ley de oferta y demanda. Entonces, si menos gente invierte en algo, su valor debería bajar.

Esto podría suceder con plataformas como Facebook y Google. El valor de un resultado, suele ser producto de una subasta automatizada. Por ejemplo, el precio de un clic dependerá de cuánta gente esté ofertando por él. Entonces, en un escenario en el que hay menos oferta, un clic podría resultar más económico. Incluso con IVA gravado.

Cuando hay menor oferta, hay mayor demanda

En principio, esta medida podría afectar los presupuestos de los negocios digitales, es verdad. Por ejemplo, montar una tienda en Shopify tiene un valor que va desde los $29 mensuales. Al tener IVA gravado, su valor iría desde los $32,48 mensuales. Claro que tampoco es demasiado si tomamos en cuenta todos los costos operativos que ahorramos al tener un negocio en Internet.

Pero, el punto al que voy, es que esto no debería ser una razón para que dejemos de invertir. Sino una oportunidad para hacerlo ya que es probable que tengamos menor competencia. Pagaremos más, es verdad. Pero, al mismo tiempo, podemos recibir mayor demanda de nuestros productos o servicios comercializados en Internet. Al final, es mejor invertir $1000 y ganar $2000 que invertir $10 y ganar $15.

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¡Nos vemos pronto!