Freelancers: 7 consejos para hacer trabajos independientes
Existe la idea de que tener un trabajito seguro es mejor que arriesgarnos como trabajadores independientes. En parte, esa forma de pensar es lógica. La tranquilidad de que llegue un sueldo a fin de mes puede justificar el que vendamos nuestro tiempo a alguien más. Pero, ¿son tan seguros nuestros trabajos en realidad? Esta época post pandemia que empezamos a vivir nos demuestra lo contrario. Es por eso que, aún si poseemos trabajo estable, contar con una fuente alternativa de ingresos es esencial. Por ello, hoy escribo sobre los freelancers y algunas buenas prácticas que pueden llevar a cabo para vivir de lo que ofrecen.
¿Qué son los freelancers?
El término freelancers hace referencia a personas que no tienen un trabajo fijo, pero ofrecen sus servicios de manera independiente. Por ejemplo, un contador que ofrece servicios de contabilidad a varias empresas o un diseñador gráfico que en vez de trabajar en agencia publicitaria busca clientes por su cuenta.
¿Es rentable vivir como freelancers? En parte sí. Hay personas que generan ingresos superiores de manera independiente que los que podrían percibir a través de un sueldo fijo. Sin embargo, para que “freelancear” sea sostenible, deberíamos tener en la mente convertir nuestros servicios independientes en un negocio digital. Esto implica estar siempre abiertos a correr riesgos, mientras estos sean controlables.
Sin embargo, para mitigar algunos de esos posibles riesgos, a continuación te doy un listado de 7 consejos si te dedicas a prestar servicios de forma independiente:
1. Ofrece únicamente servicios en los que seas bueno
Durante esta época me topado con algunos tipos de trabajadores independientes. Por un lado aquellos que son especialistas en una tarea y por otro quienes lo hacen todo. ¿Qué es mejor? ¿Ser especialista o ser todólogo? En pocas palabras, es mucho mejor ser especialista.
Piensa que se dañó tu PC y necesitas que alguien la arregle. ¿A quién llamarías? ¿A una persona que pasa todo el día dando mantenimiento a computadoras o a alguien que sabe un poco de eso pero también vende almuerzos? Tener un catálogo gigante de posibles servicios que podamos otorgar, no significa que vayamos a tener más clientes. La gente confiará más en nosotros si nos posicionamos como referentes en un solo servicio.
Eso no significa que no pueda hacer otras cosas. Por ejemplo, yo estoy trabajando en mi posicionamiento de marca personal dentro del mundo del marketing digital. ¿Qué pasa si alguien me pide que le diseñe un logo? Si tengo el tiempo para hacerlo y llego a una negociación adecuada, con mucho gusto le presto el servicio. Pero, no por ello voy a ofrecer la venta de logos como si estuviese vendiendo víveres. Hay decenas de aplicaciones gratuitas para realizarlos y gente que puede hacer ese trabajo más barato y hasta mejor que yo. ¿Por qué habría de sacrificar mi posicionamiento actual por meterme en un mercado que me genera poco interés?
2. Ten tu negocio siempre abierto
¿Cuál es el horario que debe cumplir un trabajador independiente? Pues, cuando lo necesite el cliente. Si mi lavadora se dañó el fin de semana y necesito un técnico que la repare, no puedo esperar a que sea lunes a las 9 am para que me agende una cita. Si nosotros buscamos tener un horario de oficina, podemos irnos olvidando de ser freelancers.
Un trabajador autónomo puede gestionar su tiempo de forma diferente. El no tener que cumplir un horario estricto, implica que puede utilizar diversos espacios para actividades personales, para pasar con familia o incluso para descanso. Pero no podemos limitar al cliente a que solo me escriba cuando mi negocio está abierto.
No por ello me convertiré en un esclavo de los deseos de mis clientes. Pero si tengo una línea de atención a través de redes sociales o servicios de mensajería, debo revisarlos con cierta frecuencia. Así, mis potenciales clientes no esperarán días por una respuesta mía. Luego, ya podré llegar a un acuerdo con ellos de cuándo daré atención a sus requerimientos. Pero la atención rápida es esencial y la tecnología nos facilita el poder hacerlo sin necesidad de pasar todo el día frente a la computadora.
3. No negocies tus servicios por debajo del valor de mercado
Es común caer en la tentación cobrar más barato para ganar más clientes. Pero ¿tener más clientes significa que voy a generar más ingresos? No necesariamente. Sobre todo si mis servicios son ultra económicos. Si algo se cotiza en el mercado a $10 y yo lo vendo a $5, lo que estoy haciendo es perder dinero.
¿Qué precio debería poner a mis servicios? Pues, un promedio de lo que cobra mi competencia. Si lo que ofrezco es bueno, los clientes llegarán. No es necesario regalar mi trabajo para que eso suceda.
En este sentido, trabajar muy barato o gratis para familiares y amigos es también un error gigante. ¿Quiénes son las primeras personas que estarán dispuestas a “hacernos el gasto”? Aquellas a las que les importamos. Pero si le hago un trabajo gratis a un primo, posiblemente todos mis primos busquen lo mismo. Entonces, ¿de qué voy a vivir?
4. Pide anticipos
Si el trabajo que voy a realizar va a tomar varios días en ser entregado, no tengamos miedo de pedir anticipos. Un 50% de anticipo del valor total suele ser lo ideal. Si voy a crear un sitio web y ese trabajo me va a tomar un mes, ¿Qué me garantiza que el cliente lo vaya a seguir queriendo una vez que lo haya terminado? ¿Y si durante ese mes la empresa decide cerrar o dedicarse a otra cosa?
El activo más importantes de los freelancers es el tiempo. Tengamos algún tipo de garantía de que el cliente nos va a pagar por el servicio que le estamos prestando. Y, muchas veces, un anticipo es la mejor manera de asegurar la inversión de tiempo que voy a realizar. Es posible que en el camino pierda clientes por esta política. Pero es mejor tener poco dinero en nuestra cuenta, que tener mucho dinero en papeles.
5. Evita reuniones innecesarias
Esto va de la mano con el punto 4. Cuidar nuestro tiempo es esencial. Eso no significa que le voy a dar un mal servicio a mis clientes. Pero existen muchas maneras para atenderlos de manera adecuada sin que esto implica trasladarnos todos los días a sus oficinas.
Usemos la tecnología. A través de servicios de mensajería como WhatsApp o Messenger o plataformas para videoconferencia como Zoom puedo dar una excelente atención a mis clientes y ahorrar tiempos de traslado. Es a través de estos sitios donde deberíamos llegar a acuerdos de precios y donde deberíamos proveer toda la información necesaria. Muchas reuniones físicas pueden ser evitadas con una buena gestión de estos sistemas.
¿Cuánto tiempo podemos ahorrar a la semana si nos trasladamos únicamente cuando sea indispensable? Ese tiempo lo puedo utilizar para conseguir más clientes o darle crecimiento a mi negocio.
6. Construye un sistema de distribución online
Utilizar servicios de mensajería es una excelente opción para cerrar un negocio. Pero, si automatizo aún más mi proceso, ¿Cuánto tiempo podría ahorrar? Pensemos, por ejemplo, en un servicio de coaching. Si tengo un sitio web donde la gente puede agendar su cita y hacer el pago online, el proceso de venta se volvería mucho más sencillo.
Claro, muchas personas prefieren preguntar y asegurarse bien antes de contratar algo. Pero el brindar esta alternativa, nos puede ayudar muchísimo y nos permitirá focalizarnos en lo que es más importante. ¿Quieres ver un ejemplo de un servicio distribuido de manera digital? Mira esta página de consultorías.
7. Invierte en publicidad
El último punto, pero posiblemente el más importante de todos. Si no estamos dispuestos a invertir, tendremos muchas más dificultades para ganar. Obviamente, nuestros primeros clientes serán las personas que nos conocen (si es que no les damos nuestros servicios gratis). Pero, ¿podemos adquirir sostenibilidad únicamente con ellos?
Afortunadamente, no tenemos que asumir un riesgo demasiado grande. Con $30 mensuales puede tener un amplio nivel de visualización en plataformas como Facebook. Y, posiblemente, cuadriplicaré o quintuplicaré esa inversión gracias a los contratos que obtenga como producto de esa gestión.
¿Quieres saber más sobre este tema? Lee mi artículo ¿Qué es Facebook Ads y por qué deberíamos utilizarlo?. Y si quieres aprender más sobre el uso de esta herramienta, sigue las novedades de mi sitio. En Octubre lanzaré mi curso Tu negocio en redes sociales. ¡Muy pronto te contaré más novedades sobre ello!
Existe un mercado muy grande por explotar para los freelancers
En tiempos de crisis, tenemos que ser mucho más creativos para generar ingresos. Pero la gente lo está logrando. Te invito a ver esta nota sobre Conservitas de la Teja para que veas un ejemplo de ello.
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¿Tienes otras recomendaciones que hacer a quienes viven como freelancers? ¡Comenta!
Sin duda todos soñamos con ser nuestro propio jefe y manejar a nuestro antojo el tiempo que tenemos. Aunque suena a sueño, lo podemos hacer realidad pero debemos tener muy en cuenta que trabajaremos bastante, con la satisfacción de trabajar para nosotros mismo, pero bastante.
También, sufriremos un proceso de aprendizaje porque en quienes primero confiamos es en nuestro círculo familiar y de amigos y, esto puede ser positivo si valoran nuestro trabajo pero muy negativo si esperan de nosotros un trabajo gratuito, es posible que lleguemos a hacerlo en una ocasión y ese será nuestro permiso para que constantemente nos pidan trabajos gratis.
Yo, soy músico, me dedico a realizar tarjetas musicales y dar serenatas presenciales y virtuales, lamentablemente tuve una mala experiencia con un primo pues cometí un primer error que fue responder un WhatsApp casi a media noche en una ocasión donde me pedía un favor urgente pues había olvidado el aniversario con su novia, yo estaba muy ocupada con trabajo contra reloj pero decidí ayudar y me tomé 20 minutos para hacer una corta tarjeta virtual con una canción que ya tenía grabada y editada previamente, este producto normalmente cuesta $30 y me toma más tiempo hacerlo de forma personalizada.
Luego de haber hecho esto, me escribió varias veces más para pedirme que agregue imágenes y personalice esta tarjeta, la verdad fue muy insistente pero no muy delicado en su pedido, por lo que contesté que no tenía tiempo. Días después, me escribió nuevamente para pedirme una serenata virtual a su novia para pedir su mano, me pareció un lindo detalle y le pregunté directamente “¿me estás contratando?” porque no quería trabajar gratis otra vez.
Le dije el valor de la serenata, le di un descuento que aplico siempre para mis familiares y amigos sin que me lo pidan porque los considero y, después de eso me pidió rebaja y rebaja y rebaja, finalmente ante su insistencia acepté el valor que él le puso a mi trabajo (que era la mitad del valor de mi servicio) y, cuando le pasé los datos para la transferencia, me pidió también un plazo de espera porque no le pagarían sino hasta la semana próxima pero la serenata tenía que ser el día siguiente.
Ya en ese punto yo había aceptado, le di el plazo de espera y reorganicé mi agenda para situar esa serenata que tenía carácter de inmediato, ese mismo día trabajé hasta mucho más tarde para dejar listas unas tarjetas que debía entregar el día siguiente para que no se me quedara nada pendiente. Cuando estaba por acostarme casi a la media noche, me escribió mi primo para preguntarme si puedo hacer la serenata en pocos minutos, justo a la media noche para sorprender a su novia con el pedido y le dije que no porque debía preparar algunos elementos y, además, estaba muy cansada y su pedido era muy repentino, de mala manera me dijo que bueno, que sería el próximo día (como habíamos quedado).
Llevé a cabo la serenata personalizada con las canciones que él solicitó para el pedido de mano, todo salió perfecto y ya solo me queda esperar unos días por el pago (de la mitad del valor del servicio) y eso nunca llegó… hice un par de intentos por cobrar este servicio pero finalmente abandoné la gestión porque a mí me resultaba indelicado y hasta me daba vergüenza ajena.
Así también en la agencia de publicidad donde trabajo, hubo quien hizo un logo, SIN ANTICIPO, porque era familia de su esposa. Este trabajo le tomó un fin de semana, recibió pedidos de cambios en el arte e instrucciones del cliente. Finalmente este trabajo no fue cancelado y la cliente solo supo decir que habían decidido dedicarse a otro negocio.
La familia y los amigos deben ser los primeros en quienes confías para valorar tu tiempo y tu trabajo, pero debo admitir que lo mejor que puedes hacer, si trabajas de forma independiente es darle un proceso práctico a tu gestión de cobro, siempre pide anticipo para que no tengas que perder tanto, tus productos y servicios deben ser valorados y la gente debe conocer lo que contrata y pagarlo.
Es sostenible una heladería si no regalas ni te comes los helados, esa es la verdad. Entonces, tus clientes deben saber que te están contratando y tú estás en tu derecho de poner ciertas condiciones que si no se cumplen desde un inicio, no vale la pena tomar el riesgo de perder tiempo que puede ser mejor invertido.
Me gustó mucho este artículo, al punto que casi lo he tomado como diario para desahogarme de las malas experiencias que he pasado ¡por confiada! Y, creo que los consejos son muy válidos porque para hacer sostenible la gestión independiente hay que tener mucha disciplina, ganas de trabajar y tomar con seriedad los negocios, tener las reglas claras y dejar las reglas claras a los clientes para beneficio de las dos partes.
Pues, la verdad es que es bastante difícil en países latinoamericanos, lograr un emprendimientos sostenibles en áreas artísticas. La gente suele confundir con facilidad lo que es un negocio musical con un pasatiempo.
Sin embargo, sé que tu trabajo es bueno y el reconocimiento llegará. Por eso, tener algunas prácticas como solicitar pagos anticipados o negarnos a hacer trabajo gratuito pueden ser estrategias que te permitan darle sostenibilidad a tu negocio.
¡Muchos saludos y muchos éxitos en el camino que estás recorriendo!